La saliva es muy importante para la correcta humectación de la cavidad bucal, no obstante, hay situaciones en las que su producción se ve alterada por agentes, generando sequedad en la boca, denominada xerostomía, la cual tiene entre sus síntomas, la saliva espesa. Entre las diferentes causas de esta anormalidad se encuentran ciertos medicamentos, tratamientos como la radioterapia o quimioterapia, trastornos autoinmunes como síndrome de Sjögren, entre otros.
Los medicamentos que podrían provocar sequedad bucal son aquellos que indican entre la lista de sus efectos secundarios, boca seca. Algunos ejemplos son, ciertos antihistamínicos, antidepresivos, diuréticos y analgésicos. Lea muy bien las instrucciones de cada remedio.
Aquellos que deben someterse a radioterapias o quimioterapias para el cáncer en la parte de la cabeza o cuello, podrían sufrir como consecuencia una sequedad bucal, temporal o permanente, que les proporcione saliva espesa, por la irritación de las glándulas salivales. Esto podría ocasionar, además, caries e infecciones en la boca.
Otra causa de la saliva espesa, son los trastornos del sistema inmunológico, en los cuales el propio organismo destruye sus glándulas, tejidos o células sanas. Una de ellas es el síndrome de Sjögren, en el cual se autodestruyen las glándulas productoras de lágrimas y saliva, causando sequedad en la boca y saliva espesa.
Muchas otras enfermedades pueden provocar una boca seca y por ende, saliva espesa, algunos ejemplos son, la diabetes, el Alzheimer, el Parkinson, el VIH, la artritis reumatoide, el lupus eritematoso sistémico, fibrosis quística, accidentes cerebrovasculares e infecciones de la boca como la candidiasis. Otros factores son, el consumo de tabaco, roncar en las noches o dormir con la boca abierta y la vejez.