Existe una enfermedad llamada espondilolistesis, en la cual una vértebra de la columna vertebral se desliza, ya sea hacia adelante o hacia atrás, sobre el hueso inferior a ella. Cuando se desliza hacia adelante recibe el nombre de anterolistesis y hacia atrás, retrolistesis.
Esta afección puede ser heredada o producto de otra enfermedad o actividad. En caso de ser congénita, sus síntomas se evidencian desde el periodo de la infancia y es más frecuente que el niño sufra un deslizamiento de la vértebra lumbar que está sobre la pelvis. También se puede generar por lesiones traumáticas o en personas mayores, por causa de la artritis, donde los cartílagos y huesos se desgastan más de lo normal. Otras causas son las fracturas o ciertas actividades deportivas como el levantamiento de pesas, gimnasia artística u otras que requieran demasiada elongación por parte de la columna vertebral. Este tipo de actividades podría fracturar una de las vértebras por uno o ambos lados, causando que se debilite y finalmente, se mueva de lugar.
La gravedad de la espondilolistesis se mide en cuatro grados. El grado I y II no presencian dolor alguno y no necesitan tratamiento quirúrgico; no obstante, se les recomienda a aquellos pacientes cierto tipo de ejercicios para ayudar a fortalecer la musculatura de la espalda y así, evitar que la vértebra se siga deslizando. Los grados III y IV, en cambio, presencian dolor, que puede expandirse desde la espalda hacia las piernas, por causa de una compresión en el nervio. Este tipo de grados requiere tratamiento por medio de una cirugía llamada artrodesis, donde se fusionan de manera permanente las vértebras afectadas.