La clitoromegalia es cuando el clítoris posee un tamaño más grande de lo normal, por problemas en las glándulas suprarrenales de la mujer o también puede tratarse de un problema congénito, con el cual se nace. Es importante destacar que el clítoris se agranda durante la excitación alcanzando un tamaño de hasta un centímetro y medio; esto es completamente normal, pero cuando hay clitoromegalia, el tamaño supera los dos centímetros.
En el caso de aquellas mujeres que nacen con esta patología, se puede deber al uso de anabólicos por parte de sus madres, una droga que provoca el aumento de masa muscular; a una hiperplasia suprarrenal heredada, lo cual genera que el feto femenino produzca más andrógenos provoque ambigüedad en sus genitales y a la presencia del síndrome de Fraser, que presenta anomalías genitales.
En cambio, para quienes no nacieron con ello, sino que lo adquirieron después, puede tratarse de un trastorno en el sistema endocrino, un desequilibrio hormonal como el síndrome de ovario poliquístico y una hipertecosis, que es un aumento en las células tecales de los ovarios. Otras enfermedades en las cuales ovarios y glándulas endocrinas se vean afectados, también podrían ser causantes de una clitoromegalia, por ejemplo, tumores en los ovarios o una neurofibromatosis, que es un problema en el sistema nervioso caracterizado por la producción de múltiples tumores benignos en los nervios y la piel. Otra causa puede ser un quiste localizado en el clítoris o en casos muy específicos, no se logra llegar a la causa.
Hay cierto tipo de rechazo por parte de los hombres hacia las mujeres que presentan esta anomalía, ya que la apariencia de un clítoris grande es similar a un pene pequeño, por lo cual, ellas buscan un tratamiento a través de una cirugía, en la que suelen obtenerse muy buenos resultados.