La osteotomía de Chevron fue introducida en 1976 por Corless, como una opción a la buniectomía modificada en los pacientes con Hallus Valgus que es la enfermedad que afecta deformando el primer dedo de la planta del pie junto a su primer metatarsiano contiguo con sus dos sesamoideos y la articulación que los une o mejormente conocido como “juanete” que es una de las exposiciones clínicas más frecuentes que se genera a nivel media de la articulación combinándose así el desvío del primer dedo según la línea media del cuerpo y cierta rotación al lado frontal. Esta anomalía afecta mayormente a la naturaleza femenina debido al tipo de calzado inapropiado que utilizan o por las diferentes etapas como, el embarazo, la menopausia, problemas hormonales y hereditarios. Creando síntomas como dolor por la fricción e inflamación del pie. La osteotomía de Chevron para la enfermedad de Hallux Valgus fue impulsada como una alternativa para las personas que tengan una deformación mínima o moderada corrigiendo el ángulo intermetatarsal y ángulo de Hallux sin producir algún tipo de rigidez en la articulación del primer dedo. Una de las desventajas de este proceso es que la deformidad puede tener una recaída provocando dolor y disfuncionalidad del dedo. Debido a esto decidieron modificar la forma de proceder con el tratamiento indicando a los pacientes con una deformación de 15º a 16º moderada que tengan dolor, movimiento flexible y sin procedentes quirúrgicos. Este es caracterizado por el corte plantar es mayor que el dorsal con un ángulo entre 70º y 80º que es más estable y evita la rotación dorsal de la cabeza haciendo que este no vuelva a reincidir en la deformidad debido a que actúa en el tejido óseo.