La bencina o gasolina blanca es un producto químico disolvente, usado ampliamente en el hogar y en diferentes industrias. Este producto proviene de la destilación del petróleo crudo y no es apto para automotores debido a su bajo octanaje. Está compuesto por isoparafinicos, hidrocarburos parafinicos, neuftenicos olefinicos y aromáticos derivados directamente del petróleo de tipo 59 y 54 con vertibilidad relativa.
En motores de explosión se utiliza como carburante y en algunos tipos de lámparas, como combustible. Este producto es relativamente barato y proporciona un encendido rápido, así como calor intenso en cualquier condición climática. Dentro de la industria de la pintura, este producto sirve como un poderoso disolvente, en el área química se utiliza como diluyente de alquitranes y breas.
Dentro de los hogares, el uso de la gasolina blanca sirve en el desengrasado y limpieza de diversos artículos, en ocasiones en ciertos diseños de estufas, como principal combustible. Este producto es indispensable en centros de lavado de telas puesto que se usa para eliminar manchas de alquitrán, grasa y tintes en tejidos con mucha facilidad; bastará con frotar una esponja sobre la mancha a remover y ésta se eliminará, así como el olor característico de la gasolina.
Cuando es utilizado como combustible se deben tomar medidas de precaución, como evitar por completo el contacto con la piel y los ojos, así como evitar inhalar los vapores. Se debe resaltar que en altas concentraciones, este producto resulta tóxico y podría llegar a causar la muerte; además de que se trata de un producto altamente inflamable.