Cómo funciona la cerradura

La mayoría de las puertas de casa se abren con una llave. Sin la llave correcta, la cerradura no abre. Dentro de una cerradura se encuentra un cilindro, el cual corre a través del pomo de la puerta y dentro de la puerta. Dentro del cilindro se encuentra algo llamado una espiga. Cuando la puerta está cerrada, la espiga se coloca parcialmente dentro y fuera del cilindro, evitando que el pomo de la puerta gire. Cuando la espiga queda completamente dentro del cilindro, la puerta se abre y el pomo puede girar.

El seguro del cilindro contiene en promedio cinco pares de espigas. Cada espiga tiene un peso diferente. Los pares descansan en ejes que comienzan debajo del cilindro, atraviesan la parte del medio del cilindro y la parte superior. El eje superior tiene pequeños resortes descansando sobre de ellos.

Normalmente, los seguros inferiores descansan en la parte inferior del eje, y los seguros superiores están colocados a la mitad, en la parte superior y en la parte central del cilindro. Esto significa que el cilindro no puede girar. Cuando una llave se inserta dentro del cilindro, las muescas en la llave se alinean con los seguros y los presionan hacia arriba o hacia abajo por completo dentro de los ejes. Esto libera al cilindro para poder girar. Una vez que el cilindro gira, se abre o cierra la puerta.

Una vez que el cilindro puede girar, hace girar a su vez algo llamado una leva. El movimiento de la leva libera los resortes, los cuales presionan algo que se llama una espiga movediza, que fija la puerta a la pared. Esto cierra la puerta. Al insertar la llave y girar el cilindro por el otro lado, la espiga se liberará. Muchas puertas de casa tienen botones en el pomo interior de la puerta que pueden presionarse o girarse para liberar los resortes y la espiga, cerrando la puerta sin necesidad de una llave.

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Categorias: Tecnologia
Ultima modificación: 12/21/2012