Llega el verano y ¿qué mejor motivo para lucir un collar que unas conchas? Este tipo de collares son muy sencillos de hacer y te mostraremos como hacerlos.
Existen diversos modelos y diferentes formas de hacer estos collares. A continuación te presentamos los dos métodos más usados para elaborar los collares.
El primer método y el más sencillo es escoger una concha que nos guste y hacerle un agujero con un taladro. Por este agujero pasaremos un cordel encerado que son los cordeles que se usan en joyería y para el verano van mucho mejor que los cordones de caucho. Existe otra variante, una vez tengamos la concha en el centro del cordel haremos nudos a ambos extremos del cordel para que actúen de tope e introduciremos por el mismo método conchas de tamaño inferior a la pieza central. Remataremos el collar con un nudo corredizo.
El segundo método que existe para crear collares de conchas es juntar conchas del mismo tamaño y forma y unirlas todas usando un hilo de nailon como el que usan para pescar pues es transparente y se disimulará en el caso de que por alguna razón se entrevea.
Ahora ya conoces los dos métodos más usados para crear collares, sólo falta la parte más difícil y es encontrar un diseño que realmente nos guste. Sin embargo, no sólo puedes hacer collares con conchas, puedes añadirles abalorios, piedras planas, trozos de madera… las posibilidades son muchas.
Esperamos que hayas disfrutado leyendo el artículo y quien sabe, quizás la próxima vez que vas a la playa te fijes en las conchas del mar…