No todas las viviendas pueden contar con un entrepiso. Aunque es una opción muy interesante para ganar un espació extra en la vivienda, esta deberá contar con unas características concretas como la altura o contar con el espacio suficiente para colocar un acceso a dicho espacio.
Los entrepisos podrán tener estructura solamente de madera o metal, pero nunca de hormigón en una vivienda ya edificada. Sólo podrá ir en hormigón la capa que recubra la estructura de madera o de metal. En otras palabras, el pavimento se instalara sobre estas vigas y se recubrirá de hormigón.
Igual que cuando construimos una losa de hormigón armado, en el entrepiso deberemos tener en cuenta el tamaño del mismo para que la estructura sea resistente y sea capaz de soportar el peso.
Las columnas que darán cabida al entrepiso podrán apoyarse sobre las paredes laterales de la vivienda o bien en una columna. Tanto en un caso como en otro deberemos tener en cuenta como afectará esta decisión al espacio habitable en la planta inferior.
La mejor opción será siempre, pues, decantarnos por unas vigas de metal con placas de madera. En primer lugar, porque los perfiles son delgados. En caso de quedar las vigas al descubierto, resultaran hasta cierto punto estéticas (podríamos comparar el techo resultante con un techo artesonado). En segundo lugar, porque las vigas de metal con placas de madera son más livianas que las estructuras de madera y el peso que deberá soportar la estructura de la vivienda será mucho menor y ejercerá menos presión.
En cualquier caso si podemos disponer de un espacio extra no es para pensárselo y lanzarse a la aventura de realizarlo.