El negocio de la sublimación está en una gran evolución constante, así que primeramente se tiene que tener en cuenta que el mercado pude cambiar repentinamente. Hay que mantenerse actualizado.
El siguiente paso es decidir a quién venderle, saber qué vender y cuánto se quiere vender. La reacción normal es querer hacerlo todo pero es imposible a menos que de antemano se tengan 20 clientes asegurados y una buena suma de dinero para comenzar. Por ello se dan a continuación algunos consejos para aquéllos que comienzan con formatos pequeños, como todo principiante.
Se necesita una PC con gran capacidad de memoria y espacio en disco. Un software de gráficos como Adobe Photoshop o CorelDraw. Una impresora compatible con tinta de sublimación. Las más comunes para este negocio son la Epson 980 y la Epson 3000. La primera siendo de menores capacidades que la segunda, como en velocidad, tamaño de impresión y además de menor costo. Aunque recientemente se han empezado a distribuir nuevas impresoras láser para tinta de sublimación.
También se necesita una plancha de calor. Hay de distintos tipos con distintas características, tal como las impresoras. Elija la que más se acomode a sus necesidades.
La tinta de sublimación también se encuentra en una diversidad amplia. Varían de acuerdo al tipo de impresora y al tipo de tinta que usan. Los tonos cambian dependiendo de las marcas y el tipo de impresora al que están destinadas. Algunas marcas recomendadas para las impresoras Epson mencionadas con anterioridad son JetBlaster, Sublibrite, Sublijet y Wholesale.
El mejor papel para comenzar en el negocio es aquél recomendado por el fabricante de la impresora, o la marca de la tinta. Con la experiencia adquirida se puede aventurar a probar más tipos de papeles pero en un inicio el papel común es el indicado.