Deducciones fiscales para los gastos de gasolina

Todo contribuyente reclama todas las deducciones a las que tiene derecho. Una petición errónea de deducción, por otro lado, puede resultar en el pago de impuestos adicionales, intereses y multas. Conocer la normativa fiscal sobre la deducción de los gastos de combustible y kilometraje ayuda a evitar estos gastos inesperados.

Hay servicios de rentas que ofrecen a los contribuyentes dos métodos de cálculo de las deducciones de gastos de vehículos. En primer lugar, un contribuyente puede multiplicar los kilómetros de su vehículo vinculado a una actividad económica. Como alternativa, el contribuyente podrá deducir el monto de sus gastos reales incurridos para el uso comercial de los vehículos.

Además de combustible, un contribuyente pueden deducir otros gastos como la depreciación de su vehículo, gastos de estacionamiento y peajes, derechos de registro y licencia, seguros, llantas, reparaciones, etc. Si el contribuyente utiliza su vehículo para negocios y uso personal, debe asignar el uso comercial como porcentaje de las millas totales conducidas. Para el cálculo de la deducción, se multiplica el total de gastos reales para el vehículo por el porcentaje de uso del negocio.

El contribuyente podrá deducir los viajes de un lugar de trabajo a otro en la zona donde se encuentre su sede social. También puede deducir el kilometraje o gastos de combustible como resultado de visitas a los clientes y reuniones de negocios. La conducción entre el hogar y el lugar de trabajo habitual no será deducible.

Un contribuyente que reclama una deducción por su vehículo debe aportar documentos que permitan comprobar dichas deducciones. Un registro de kilometraje diario, el destino y el propósito de negocio de los viajes son suficientes para reclamar una deducción de kilometraje. Además el contribuyente debe mantener registros que documenten la adquisición y propiedad del vehículo.

 

Sobre el artículo

Categorias: Empresas
Ultima modificación: 07/18/2013