Cómo ahorrar sorteando los períodos inflacionistas

En la actualidad resulta complicado evitar las dudas respecto a la rentabilidad real de diferentes opciones a la hora de proteger nuestros ahorros. Uno de los peores escenarios para que nuestro capital se diluya es que se produzca un período inflacionista crónico.

Esta situación se traduce en la subida contínua y persistente de los precios que, debido a la pérdida del poder adquisitivo del dinero y de otros activos financieros, se traduce en una situación de incertidumbre que provoca serias consecuencias en la economía familiar.

El incremento de los precios derivado de este escenario económico se mide de forma objetiva analizando la evolución de los costes de determinados bienes de consumo y servicios, cuyo precio aumenta debido, en el mejor de los casos, a un incremento de su demanda.

Si el precio de los productos aumenta, debemos plantearnos seriamente de qué forma mantener nuestros ahorros a salvo, pues la pérdida del valor del dinero será constante y desaconseja mantener inmovilizado un capital que irremisiblemente menguará debido a las fluctuaciones.

Una de las opciones recomendadas a muchos ahorradores es la de invertir en valores “refugio”. Se trata de bienes que no pierden su valor con el uso, como el oro o las joyas, por ejemplo. De hecho, la escalada constante de los precios ha determinado jugosos beneficios para este sector.

Hace años, la inversión en capital inmobiliario era una de las opciones favoritas, debido a las posibilidades de realizar ventajosas operaciones. El escenario actual ha modificado sustancialmente estas opciones, por lo que conviene estar atento a otras posibilidades con mejores perspectivas.