Solamente eligiendo la modalidad de pago así como la tarifa de nuestro teléfono móvil podremos ahorrarnos un buen pellizco todos los meses que al cabo del año se puede traducir en varios cientos de euros.
Para decidirnos en la elección entre la modalidad de prepago y la de contrato sólo debemos tener en cuenta un par de factores muy y sopesar los puntos a favor y en contra. Si usamos una tarjeta de prepago debemos saber que las tarifas por minuto generalmente son un poco más elevadas pero nos compensa enormemente si sólo usamos el teléfono móvil de manera puntual ya que nos ahorraremos el mantenimiento mensual de la línea al que se ven sometidas las líneas de contrato.
Por el contrario, si usamos el teléfono de forma más asidua entonces nos compensará el tener un contrato ya que el precio por minuto será más económico. Además, podemos acogernos a una de las diferentes tarifas en función de nuestro gasto y establecer varios avisos que nos notifiquen del límite consumido para saber en todo momento a cuanto asciende nuestra factura.
De todas formas debes saber que en estos meses se están poniendo de moda los OMV (Operadores Móviles Virtuales) y que puede ser una forma de ver la telefonía móvil desde un nuevo punto de vista ya que ofrecen las mismas condiciones que ofrecen las líneas de contrato pero con enormes mejoras. Entre estas mejoras puedes encontrar la no existencia de permanencia, el coste cero mensual de la línea o que pagas solamente por las llamadas y mensajes de texto que realices. Además disponen de atractivos bonos de datos por lo que utilizando las aplicaciones adecuadas puedes ver reducida drásticamente el total de la factura del teléfono móvil.