Otro tipo de inversiones que podemos hacer con nuestro dinero es la que se centra en la adquisición y venta de divisas extranjeras teniendo en cuenta sus fluctuaciones.
A diferencia de la inversión con acciones u otros tipos de productos bursátiles financieros, la inversión de divisas es una inversión rápida y ágil por lo que en cortos períodos de tiempo podemos tener amplios beneficios pues es un valor que sufre cambios constantes en su valor y el precio que podía tener al inicio de la sesión puede ser completamente dispar con relación al obtenido en el cierre o cuando hayan pasado un par de días. Por tanto como con otro producto o valor en el que estemos interesados deberemos saber cuál es el precio medio para saber cuándo es el momento de comprar y saber en qué momento oportuno venderemos antes de que vuelva a fluctuar.
Es conveniente saber que las divisas actúan siempre dentro de unos límites y que en caso de producirse una fluctuación por encima de dichos límites intervendrá el Banco Central para regularizar dicha situación. Por tanto a la hora de invertir en divisas es importante diversificar nuestra cartera de activos y centrar nuestra atención durante los valores de la misma en el transcurso de la sesión para vender aquellas que empiecen a depreciarse y comprar aquellas que empiecen a aumentar su valor para poder venderlas posteriormente y tener un margen de beneficio con la transacción.
Nuestro consejo es que al suponer una inversión de riesgo no es recomendable invertir más del 10% de nuestro efectivo en este sistema.