La Renta Mínima de Inserción (RMI) constituye un apoyo que se otorga a las personas sin los recursos suficientes para cubrir las necesidades básicas y que por ello se encuentran en una situación vulnerable.
La totalidad de las Comunidades Autónomas cuentan con áreas de Servicios Sociales que disponen de un sistema de apoyos, y tiene nombres diferentes: salario social, renta mínima, renta garantizada de ciudadanía, renta social, etc.
Para poder obtener algún tipo de ayuda de las previamente mencionadas es necesario acudir con el trabajador social del ayuntamiento o de la comunidad. El trabajador social dará la información pertinente paso por paso y hasta podrá ayudar con la realización de los trámites puesto que el proceso administrativo puede resultar complicado para el ciudadano común.
Cada comunidad autónoma establece sus propios requisitos para proporcionar este tipo de ayuda. Pero, comúnmente los requisitos son:
- Estar afiliado y contar con antigüedad en un municipio de la comunidad autónoma.
- Estar en una situación de vulnerabilidad al carecer de los recursos económicos indispensables para cubrir las necesidades básicas de la vida diaria.
- Haber cumplido con la solicitud de ayudas, prestaciones y pensiones que le corresponden.
Aceptar las reglas de inserción laboral, orientación y formación que disponga la comunidad autónoma. Puesto que no se otorga una ayuda económica sin hacer lo posible para exigir que la persona se integre a la vida laboral.
El proceso de aprobación del apoyo a partir del momento en el que se hace la solicitud puede ser prolongado. En algunos lugares puede requerir varios meses de espera. Es recomendable que usted consulte los servicios sociales de su ayuntamiento.