Lo primero que debe hacerse es inspeccionar el sitio donde se construirá la escalera, se deben considerar varios factores, por ejemplo: Tipo de terreno o superficie donde se apoyará la escalera, cantidad de iluminación tanto natural como artificial con la que cuenta el sitio, dimensiones del área que se destinará para la escalera, tanto en planta como la altura que requeriría para cumplir con la función adecuadamente, verificarse en el sitio de construcción si existen obstáculos que no se pueden eliminar y que deban de considerarse como inamovibles al momento de diseñarla.
Ya que sean considerado todas las características físicas del sitio donde se construirá la escalera, se procede a trabajar en su diseño, aquí interviene el gusto del cliente y las características y funcionalidad que se deseen tener, con toda la información anterior se procede al diseño y a la elección del material que se deberá usar para que se cumpla con todas las características de funcionalidad, estética, seguridad y precio.
Tomando como referencia básica la altura del claro así como las dimensiones de la planta donde se construirá la escalera, se procede a hacer la distribución de los escalones, la altura entre huella y huella deberá ser máximo de 0.17 m., el ancho de la misma no deberá ser menor de. 0.30 m., esto le dará la seguridad necesaria para proporcionar comodidad al usuario, el largo de la huella dependerá del área disponible, mientras más larga mejor. Esta dimensión preferentemente no deberá ser menor a 0.60 m., si el área permite disminuir la altura entre huella y huella se conseguiría hacer mucho más cómoda la escalera. De ser posible, en los puntos de cambio de dirección de la guía de la escalera es recomendable colocar un descanso de cuatro lados, eliminando escalones angulares, ya que son un poco menos seguros por la disminución de área de contacto en sus aristas.