Cómo tratar con gente imposible

Todos conocemos personas que son difíciles de manejar. Son personas que además de negativas abrigan una mala reacción por cada buena acción que se intente en el acercamiento hacia ellas. Cuando las cosas están planteadas de este modo y esa persona no demuestra ningún interés en revisar su conducta, alejarse de ellas es la mejor opción. Sin embargo, existen ocasiones en que aplicar tratamiento de distancia resulta imposible. Puede ser en el trabajo, un grupo de amigos o dentro de la propia familia. En estos casos desarrollar algunas nociones de psicología práctica pueden ayudarte.

Primero asume tu parte de la responsabilidad en el intercambio. Tu predisposición hacia esa persona que juzgas imposible y no tienes interés alguno en tolerar ni herramientas para enfrentar puede cambiar tan pronto como consigas actuar sin reaccionar. Entonces tu cabeza estará libre para realizar grandes progresos en relación a esta persona. Se trata de emociones y a través de ellas tienes la capacidad de reducirte a alguien que intercambia golpe por golpe o a alguien que los transforma en algo mejor.

No se trata de librar una batalla de egos para ver quien tiene una vocación de conflicto superior, sino de responder racionalmente y cortar un intercambio pernicioso. La negatividad alimenta más negatividad. Allí hacia dónde va la atención fluye la energía. Aquello en lo que nos concentramos aumenta la sensación de malestar ya que magnifica la sensación, como echar más leña al fuego.

Para poder tratar con gente imposible debes ser más simple que ellos, evitar entrar en discusiones acerca de quién tiene la razón y quién se equivoca. Aléjate de las polémicas. Por algún extraño motivo cuando hay un foco de conflicto la gente disfruta hablar sobre él y analizarlo, cuando eso es lo último que debería hacerse ya que cuanto más se habla de algo, más evidente se vuelve y más atención requiere.

No sería mala idea intentar ponerse en los zapatos del otro. Solemos olvidar que una pelea tiene por lo menos dos partes. Intenta colocarte en la posición de esa persona con la quien chocas permanentemente y averigua si no hay cosas que de tu lado podrían ser modificadas con la finalidad de mejorar el enfoque.

Por último, también ejercita verte desde fuera, como un observador de ti mismo. Como ya dijimos, tú y tus emociones forman parte del mismo ser, por lo que conectar con ellas desde una posición ajena a todas las sensaciones que cargan tu sentir puede ser el último paso para aprender a tratar con gente imposible.

Sobre el artículo

Categorias: Vida social
Ultima modificación: 08/05/2012