El triángulo es una de las figuras geométricas más conocidas. Se trata de un polígono compuesto por tres líneas rectas que se cortan de dos en dos en tres puntos distintos, de un modo no colineal. Dicho así suena un poco extraño, pero realmente el triángulo como decíamos se trata de una de las figuras geométricas más habituales. El lugar donde se cortan unas líneas rectas con las otras líneas rectas es conocido como vértice.
Ya sabemos entonces que los triángulos tienen tres lados, pero que también tienen tres ángulos. Precisamente en función de sus ángulos existen distintos tipos de triángulo.
Triángulo Equilátero: como su propio nombre indica es el que tiene todos los lados y todos los ángulos iguales.
Triángulo Isósceles: es la figura geométrica que tiene dos ángulos y dos lados iguales.
Triángulo Escaleno: Es el más raro de todos, puesto que ninguno de sus lados ni de sus ángulos son iguales.
Uno de los problemas geométricos que más a menudo plantean los profesores en las escuelas y a los que a diario se enfrentan millones de niños en distintos países es precisamente saber cómo calcular los ángulos de un triángulo.
Si aún no conoces la manera de hacerlo a continuación te lo mostramos. Ya que se puede calcular el tamaño de un ángulo a través de los otros dos que también forman el triángulo.
Lo primero que debes hacer es medir los lados de los triángulos, mejor dicho los dos lados que sí conoces. Como ejemplo diremos que un lado tiene 25 grados y que el otro tiene 55.
El siguiente paso será sumar ambas mediciones lo que nos dará como resultado 80 grados.
La operación cómo ves no puede ser más sencilla, puesto que ahora solo tendrás que restar el resultado anterior a 180. Por lo tanto el ángulo que desconocías cuántos grados tenía, ahora ya sabes que tiene cien.