Cómo escribir un cuento

Si eres un lector ávido, de seguro has sentido muchas veces deseos de ser escritor. El cuento es un género literario que por sus características puede ser ensayado por “autores” sin más experiencia que mucha lectura y algunos borradores.  Los cuentos no tienen reglas ni dogmas, puedes moverte libremente según lo demande el relato y tú prefieras. Con la práctica conseguirás encontrar la voz que te ayude a componer y exponer tu historia. Sin embargo, si eres un principiante, lo mejor que puedes hacer es aferrarte a oraciones simples que expresen sin demasiado preámbulo el rumbo que va tomando tu historia.

Por lo demás, lo único que necesitas para escribir un cuento es una historia que contar y en este artículo trataremos de cubrir todos los detalles que deberás tener en cuenta para que otros disfruten de tu relato. Iremos enumerando las alternativas que deberás escoger:

NARRADOR

Escoge un punto de vista narrativo. Puedes escribir la historia como si fueras uno de los personajes (primera persona), es decir, una voz narrativa que sólo cuenta lo que sabe; como un narrador que presenta la historia según alguno de los personajes, lo que involucra al lector, lo hace sentir parte de la historia; o como lo que en literatura se llama un narrador omnisciente, aquel que sabe todo lo que sucede, más que los  mismos personajes.

PERSONAJES

Los personajes condimentan tu historia. Un cuento tiene uno o varios protagonistas y personajes secundarios. Piensa en ellos con cuidado; intenta delinear el o los personajes principales de tu historia – sus protagonistas- para que a tu lector le parezcan reales. Debes desarrollar las características tanto físicas como psicológicas de tus personajes para que la historia no dependa sólo de tus caprichos. Puede parecer difícil si nunca has escrito una historia, pero notarás enseguida cómo son ellos los que van condicionando la historia, como si se tratara de la vida misma. En algunas ocasiones, te sentirás dominado por el relato gracias a tus personajes .

LA TRAMA

Tu historia, como dijimos, necesita demostrar que lo es. Si atrapas al lector con un buen comienzo tendrás su atención, pero para ganarte su confianza debes demostrarle que tu cuento va hacia alguna parte. El nudo es el momento de la historia en el que introduces un conflicto. La historia a partir de entonces debe girar en torno a este problema, que podrá ser resuelto o no pero al cual el o los protagonistas debe enfrentarse. El conflicto generalmente toma alguna de las siguientes formas:

  • Persona vs. Persona
  • Persona vs. Naturaleza
  • Persona vs. Sociedad
  • Persona vs. El destino
  • Asegúrate de que atrapas al lector con un buen conflicto a resolver.

ESCENARIO

Piensa dónde sucederán los hechos y procura situar a tus personajes en ese contexto. Muchos autores sin experiencia cometen el error de soslayar esta decisión. Si estás escribiendo un cuento futurista, seguramente tus personajes conduzcan vehículos distintos a los que conducimos hoy en día, o quizás tengan otros hábitos de alimentación, o hablen otro idioma

DESENLACE

Aunque puedes extender la incertidumbre tanto como lo desees, y aunque un cuento no siempre precisa un final conclusivo, recuerda que tienes una limitación de extensión. Respeta el final de tu cuento.

Ojalá puedas aprovechar estos consejos en poco tiempo. Escribir siempre requiere práctica, o como dicen algunos, “horas de vuelo”.

 

Sobre el artículo

Categorias: Educación
Ultima modificación: 07/05/2012