El apóstrofo es un signo de puntuación con forma de comilla simple que se utiliza en diferentes lenguas que utilizan en alfabeto latino y tiene la forma de una comilla simple. Si quieres saber algunas peculiaridades y saber como se usa te invitamos a que sigas leyendo.
En castellano el apóstrofo solo se utiliza en poesía para indicar la elisión de una letra normalmente dos vocales para poder jugar con el número de sílabas en los versos y que su número se adecuara según la composición. Es evidente que su uso es arcaico y muy especializado por lo que es muy normal encontrarlo en un registro normal.
En inglés el apostrofo se utiliza en diferentes casos y es más usual el poder encontrarlo. El primero de sus empleos y que seguro que te viene a la mente es el de las contracciones de los verbos (He is = He’s). Otro de los usos de este símbolo en la lengua de Shakespeare es el de indicar la posesión. En lenguaje informal sólo es necesario poner el apóstrofo al final del nombre de la persona a la cual pertenece el objeto mientras que en un registro más formal deberá ir seguido por una “s”. El tercer caso del uso del apóstrofo se utiliza para hacer las abreviaciones en los números (fechas).
No solamente son el castellano o el inglés las únicas lenguas que usan el apóstrofo, puedes encontrarlo en el catalán, el francés… y como has podido comprobar en cada lengua se usa para unos casos determinados por lo que si te gustan los idiomas puede que lo encuentres curioso cuanto menos.