En qué consiste el Método Grow

Hay cosas sencillas que se pueden hacer todos los días para ayudar a combatir el hambre que afecta a una de siete personas en el mundo. El método GROW propone algunos métodos sencillos que ayudan a las personas a ser una parte sostenible, próspera y solidaria de ese enorme sistema que está en funcionamiento todo el tiempo: el sistema alimenticio. El cual consiste en la red global entre productores de comida en el campo y en las industrias, los vendedores en los supermercados y los consumidores en las tiendas locales y las cocinas.

El método GROW consiste de cinco pasos para cambiar la forma en cómo compramos, cocinamos y comemos para hacer el sistema alimenticio más funcional para todos:

Apoyar a los pequeños campesinos: se necesita proteger a 1.5 billones de personas que viven en las pequeñas granjas alrededor del mundo y que cultivan la comida para alimentarse, ellos, sus familias y sus comunidades. Apoyar a estos campesinos al comprar sus productos es indispensable.

Ahorra comida: en los países desarrollados se desperdicia casi tanta comida cada año como la cantidad de comida que se produce en los países subsaharianos africanos cada año (222 millones de toneladas). Además esto conlleva a la emisión de gases de efecto invernadero, cuando toda esa comida termina en un basurero. Podemos crear menos desperdicios almacenando las frutas y los vegetales de una mejor forma y usando las sobras de las comidas de manera creativa.

Cocina inteligente: cocina a fuego lento una vez que el agua ha hervido dentro de una olla. Podrá parecer como una insignificancia pero si todos las casas en Brasil, India, Filipinas, España, Reino Unido y Estados Unidos lo hicieran cada vez que cocinan durante un año, se podrían ahorrar cerca de 30 millones de megawatts por hora. El beneficio de ello sería más grande que si las mismas casas plantaran un árbol y lo dejarán crecer durante 10 años. Hay que imaginar lo que se podría lograr si no se cocinara de manera innecesaria.

Compra lo de la temporada: se desperdicia mucha energía creando las condiciones para cultivar fuera de temporada. La fruta de la temporada no simplemente sabe mejor sino que usa menos energía para ser producida.

Menos carne y lácteos: es sorprendente saber que un trozo de carne de res de 500 g contiene 6810 litros de agua. Aunque no se lee de manera literal, pero es el agua que se necesita para producir esa cantidad de carne. Si una familia cambiara la carne por frijoles en un guisado, podrían ahorrar 6000 litros de agua en simplemente una comida. El impacto benéfico que eso tendría a reducir los gases de efecto invernadero sería sorprendentes.

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Categorias: Educación
Ultima modificación: 01/21/2013