Un oasis es un área acuática única dentro de una región árida. Dentro de dicha área, hay numerosos ecosistemas, o zonas de interacción entre microorganismos, plantas y animales localizados que tienen redes de comida específicas así como depredadores. Los oasis tienen niveles significativos de biodiversidad, los cuales se deben al hecho de que algunas especies tienen orígenes marinos. Muchos oasis en el desierto están amenazados hoy en día por el cambio climático, la agricultura y las especies invasoras.
Un oasis es una pequeña área de vegetación que rodea a un cuerpo de agua en un desierto. Los oasis pueden estar presentes en regiones áridas debido a factores específicos relacionados al clima, la forma de la tierra, y los patrones hidrológicos. Proporcionan un hábitat para los animales y hasta para los humanos. La estabilidad de un oasis depende de la distribución y utilización de los cuerpos de agua cercanos, así como de las interacciones entre los ecosistemas cercanos y el clima local.
En el ecosistema, las plantas, los animales y los microorganismos interactúan como una unidad dentro de su ambiente. Los factores principales que ponen límites a los ecosistemas son el abastecimiento de comida y el territorio, los cuales son alterados por fenómenos naturales como el fuego, los desastres, y la presencia de depredadores. Cada organismo viviente en un ecosistema tiene un rol específico (conocido como nicho). Debido a ello, si cualquier organismo dentro del sistema se ve amenazado, el resto del ecosistema puede fracasar.
Los ecosistemas existentes en los oasis desérticos son extremadamente vulnerables a la influencia humana.