Antiguamente, en Grecia, se utilizaba la palabra bárbaro para designar a toda persona extranjera que no hablaba griego y que por tanto su lengua sonaba para los oídos de las personas autóctonas como un balbuceo.
Por otra parte, los romanos utilizaron dicha palabra para designar a todos los habitantes de las regiones fronterizas con su territorio. Dentro de este tipo de definición para los bárbaros podemos encontrar una amplia rama de pueblos bárbaros como:
De raza amarilla como los avaros y los hunos
De raza blanca eslava como los vendos o los sármatas
De raza blanca como los galos, los iberos, los germanos, los francos o los visigodos
Estos pueblos bárbaros, sobre todo los que se encontraban en la zona norte de la frontera del imperio romano viendo la situación en la que estaba sumida Roma aprovecharon para realizar una serie de campañas bélicas con las que saquearon ciudades y propiciaron la caída del Imperio romano en occidente. Existen varias tesis de porqué se produjo tal decadencia pero las citaremos por encima por si queréis investigar por vuestra cuenta. Estas tesis son: la tesis de la decadencia; la tesis de la continuidad; la tesis del colapso; o, las tesis raciales.
Por último decir que posteriormente se le aplico un sentido peyorativo a la palabra bárbaro para designar a una persona que no poseía los mismos valores que una persona del mundo civilizado y por tanto era considerada como inferior y que debía estar al servicio de esta persona civilizada. Por ejemplo podemos encontrar el caso de los españoles al descubrir el nuevo mundo y su pretexto de evangelizar a los pueblos “bárbaros” desconocedores de la palabra de Dios.