Todas las estaciones prevén alguna clase de peligros para el manejo, unas por las olas de calor, otras por el fio y la nieve y en este caso el otoño también supone que tomemos ciertas precauciones al momento de salir a las calles y carreteras. Si deseas saber cómo conducir en otoño pues has llegado al sitio correcto, pues te dejaremos una serie de consejos para poder conducir de forma segura y llegar a destino sin ningún tipo de problemas. Veremos que las hojas que caen en esta estación pueden ser nuestras principales enemigas y explicaremos por qué.
Las hojas secas, si están caídas sobre los caminos o carreteras pueden estar eventualmente tapando algún tipo de bache que nos lleve a desestabilizar el coche y podemos perder el control de este. Asimismo, debemos saber que las hojas pueden también mojarse por el efecto de las lluvias lo que puede crear una especie de terreno resbaladizo donde en caso de manejar a alta velocidad nos pueda jugar en contra. Es preciso mencionar que las frenadas bruscas en este tipo de terrenos pueden llevarnos a un deslizamiento de los neumáticos y seguramente terminemos, en el mejor de los casos, en una cuneta con hojas y sin daños mayores. Pero esto por supuesto con mucha suerte, ya que existen otros factores como el tránsito de otros vehículos o algún árbol o columna donde podríamos impactar.
En el otoño eventualmente aparecen tambien algunos bancos de niebla sobre las carreteras o caminos lo que dificulta por cierto la visión. Para estos casos, lo mejor es utilizar los faros antiniebla ya que los comunes seguramente nos puedan jugar una mala pasada, reflejando en la pared de niebla con la consecuencia de algún tipo de encandilamiento. Mantener el parabrisas libre de hojas seguramente será muy importante también. Finalmente, no es muy aconsejable estacionar sobre un montón de hojas secas ya que al momento de volver a encender el coche la salida del escape pueda expulsar algunos gases y combustión que es un peligro real de fuego.