Como sabemos existen varios métodos para depilarse las piernas, de los que generalmente solemos optar por el que nos lleva menos tiempo y nos cueste más barato el cual es la rasuradora o maquinita de afeitar, aunque esto no siempre beneficie a nuestra piel si es que no se toman los recaudos necesarios, pudiendo ocasionar que los vellos crezcan cada vez con más frecuencia, lo hagan por debajo de la piel creando pequeños granos que pueden infectarse o también haciendo se engrosen y sus raíces sean más fuertes.
Consejos para una depilación impecable
Serán necesarias una maquinita de afeitar nueva (cámbiela después de cuatro veces de haber sido usada), crema hidratante, gel o espuma de afeitar, agua y una toalla.
Antes de proceder al depilado es esencial limpiar y exfoliar perfectamente la piel, pudiendo utilizar para esto un guante de crin, que preparará la piel eliminando las células muertas y de paso, levantando todos los vellos a ser rasurados.
Una vez lista la piel, se la humedece con un paño mojado o si es posible, mójelas directamente en la bañera sin secarlas después, luego aplicar gel de afeitar, que ayudará a que la maquinita se deslice por la piel con facilidad sin lastimarla. Evite usar jabón para esto pues su acción puede producir pequeñas escamas en la piel, perjudicando el depilado. En último caso, si por alguna razón no posee la crema de afeitar, puede perfectamente utilizar un poco de acondicionador de cabello, que suavizará la piel, facilitando de la misma manera la afeitada. Hacerlo durante la ducha caliente también ayuda a que la piel esté apta para el depilado y que el vello esté blando.
Se debe hacer la rasurada en la dirección del vello, lo contrario a como se procede con la cera en la que se tira el vello del sentido contrario. Importante es hacerlo en un movimiento continuo evitando de esta manera posibles cortes, yendo por partes, empezando por la parte más visible, luego la parte trasera de las piernas. De tanto en tanto, limpie la afeitadora mojándola un poco.
Acabado esto, enjuagar y secar las piernas para luego aplicar sobre ellas algún antiséptico.