Las manos abarcan desde la muñeca hasta la yema de los dedos, tienen cinco dedos y forman parte de las extremidades del cuerpo humano, tiene al menos veintisiete huesos.
Se utilizan en todo lo que hacemos y están expuestas a todo tipo de agentes que se encuentran en el medio ambiente que nos rodea, el calor, el frío, productos químicos, entre otros. Estos agentes pueden provocar grietas, irritaciones, manchas y otros efectos que harían que nuestras manos luzcan ásperas y resecas.
Algunos consejos para evitar que sucedan las situaciones mencionadas anteriormente:
- Mantenerlas limpias, lavarlas y secarlas después de realizar cualquier actividad.
- Aplicar crema humectante todos los días, y luego de realizar actividades en las que se ha manipulado mucho, para mantenerlas hidratadas.
- En el momento de aplicar la crema, hacerlo dando masajes suaves, que fomente la irrigación sanguínea
- Al realizar alguna actividad en la que se utilizarán productos abrasivos, por ejemplo, lavandería, jardinería, utilizar guantes, esto evitan el contacto directo con las manos y por ende el maltrato.
- Mantener las uñas en buen estado, limarlas y cortarlas.
- Evitar el uso de jabones fuertes
Si ya se tienen las manos resecas, se pueden realizar tratamientos caseros y naturales:
- Exfoliarlas: mezclar aceite para bebé, azúcar, avena y yogurt, hasta hacer una pasta, ponerla sobre las manos por espacio de 5 minutos, luego lavarlas con agua tibia y secarlas bien.
- Hacer ejercicios utilizando una pelota pequeña, de goma, la que se deberá apretar y soltar, esta es un tipo de gimnasia natural.
Otro punto importante es mantener una dieta saludable, rica en vegetales, verduras y frutas, así como tomar ocho vasos de agua al día.