Los granitos son básicamente el exceso de suciedad o sebo que puede acumularse en los poros, taponándolos, llegando a generar incluso, si es que no son tratadas a tiempo, una infección en los poros la cual es el acné.
Antes de iniciar el tratamiento es primordial comprender lo que ocasionan ciertos malos hábitos que solemos adoptar en la urgencia de deshacernos de los granos, que son el presionar la piel para tratar de quitarlos, e incluso llegar a hacer estallar aquellos ya infectados llenos de pus, lo que inevitablemente resultan en cicatrices, por lo que es recomendable no arriesgarse y evitar por completo hacer esto para no dañar más de la cuenta la piel, y recurrir a otros medios.
Tratando el cutis con granos
El limón, por sus propiedades astringentes y desinfectantes será el principal ingrediente en el tratamiento, para lo cual necesitará todo el zumo de dos limones, y directamente mojar la región de la piel donde note que están los granos, si es necesario, aplique el zumo por el rostro entero antes de ir a dormir, dejándolo hacer efecto por la noche entera. Posteriormente a la mañana siguiente, removerlo con mucha agua tibia, cuidando de que no hayan quedado residuos. Una vez limpio el rostro, untar alguna crema hidratante o humectante de su preferencia.
Lo beneficioso del limón es que paulatinamente irán desapareciendo los granos, sin lastimar la piel, ayudándola a que esté siempre desinfectada, limpiando los poros a profundidad y dejando el cutis con una apariencia muy fresca. Es importante evitar el sol durante el tratamiento, pues el limón en contacto con los rayos solares puede llegar a manchar la piel.