Una impecable manicura hecha en la comodidad del hogar es muy sencillo de realizar si se toman en cuenta ciertos pasos fáciles a la hora de embellecer las manos.
Remoción del esmalte viejo
Primeramente se debe remover muy bien el resto del esmalte ya usado que haya quedado en las uñas, de manera a que éstas estén bien limpias. Para esto necesitará humedecer un trozo de algodón con una relativa cantidad de un buen quitaesmaltes, generando una leve presión sobre las uñas para limpiarla, evitando pasar el algodón sobre la piel de los dedos para no mancharlos.
Limar las uñas dándoles forma
La lima es uno de los instrumentos esenciales a la hora de realizar una manicura impecable, pues sin ella difícilmente se le dará esa forma deseada que queremos lograr para nuestras uñas, después de limpiarlas con el quitaesmalte, de esta manera la superficie de las mismas estarán lo mejor posible para que el acabado final con el nuevo esmalte quede perfecto. Utilice las limas hechas de cartón, limando delicadamente desde los extremos de la uña hacia el centro.
Las cutículas
Ayúdese de un palillo de olivo para limpiar las uñas por debajo de éstas, moviendo las cutículas en el sentido contrario, para suavizarlas y removerlas fácilmente.
Manos hidratadas y base del esmalte
Evite si es posible que las cremas hidratantes vayan a las uñas puesto que la oleosidad de éstas puede imposibilitar la buena fijación del esmalte. Colóquese una capa de base protectora incolora antes de aplicar el esmalte, para proteger las uñas de antiestéticas decoloraciones.
El esmalte
La mejor técnica cuando pinte sus uñas, es humedecer el pincel dentro del esmalte, quitando el excedente del mismo por el borde del frasco, luego proceda a pintarse desde la parte media de la uña, hacia el extremo, repitiendo este movimiento en las otras porciones que aún faltan de la uña. Déjela unos segundos secar, y refuerce con una fina pasada más, si es necesario, sin abusar de la cantidad.