Prototipos de belleza

En verano el cuerpo se ve más desnudo que en ninguna otra época del año, y en los que como consecuencia nos resulta mucho más difícil ocultar todos esos defectos que nos encontramos a nosotros mismos.

Cuando una persona no se encuentra a gusto con su cuerpo la consecuencia más común es someterse a un régimen. A pesar de que en los últimos años los hombres también se están apuntando a está práctica, las grandes seguidoras son las mujeres. La diferencia básica entre sexos son las motivaciones que les llevan a ponerse a régimen; mientras que los hombres buscan cambiar su tamaño y/o forma corporal, las mujeres lo que buscan es acercarse a su prototipo de mujer.

Si nos paramos a pensar, descubrimos que desde hace ya muchos años, y a lo largo de toda la historia de la humanidad en todas las culturas se ha puesto un extraño empeño en modelar el cuerpo femenino al antojo.

Esta necesidad se crea elevando los estereotipos corporales a metas existenciales. Se promueven a través de los medios de comunicación la creencia de que la delgadez es el estado más deseable. Lo que no cuentan es que la estabilidad emocional no es algo que se logra con la delgadez, sino con un largo trabajo de desarrollo personal.

Tenemos que ser lo suficientemente inteligentes como para pasar por encima de esas necesidades que nos crean agentes externos y que no van en beneficio de nuestra salud. Tenemos que aprender a llevar una dieta equilibrada durante todo el año, una dieta sana que nos aporte un aspecto saludable, y sobre todo tenemos que aprender a huir de querer asemejarnos a esos prototipos exagerados que se nos muestran, a ser realistas y a desterrar las soluciones drásticas ante la llegada inminente del verano.

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Categorias: Belleza
Ultima modificación: 10/02/2013