Una de las técnicas de cocción más sanas es la que utiliza el calor del vapor para cocer los alimentos, los cuales preservan sus nutrientes, sin perder el sabor, contrario al muy conocido mito de que aquello cocinado al vapor no tiene sabor, lo que en la realidad no es así.
Cocinando sin vaporera
Es fácil cocinar al vapor si se cuenta con una vaporera, en la que se pueden preparar alimentos como carnes, pescado, verduras, etc. Pero en el caso de que no contemos con ella, igualmente se podrá hacerlo si se tiene a mano una cacerola u olla, junto con un colador de metal de aquellos utilizados para colar el agua de las pastas.
Seguidamente debe verterse un poco de agua en el recipiente a utilizar, colocando por encima del recipiente base el colador, sin que éste haga contacto con el agua. Posteriormente poner los ingredientes que cocinaremos dentro del colador y luego procedemos a taparlo.
Dejamos que el agua comience a hervir para que de esa forma su vapor comience la cocción de los alimentos, si observamos que el agua se va evaporando muy rápidamente debemos agregar más agua caliente para no interrumpir la cocción.
Si el agua se va evaporando, debemos ir agregando más, pero debe ser caliente para no cortar la cocción. En el caso que deseemos condimentar los alimentos se debe en ese caso proceder a añadir en el agua las hierbas a utilizar y otros líquidos como el vinagre o el vino. También se puede utilizar algún caldo en lugar del agua para la cocción al vapor de los alimentos. Es fundamental que los alimentos no sean alcanzados por el agua hirviendo, para obtener una buena cocción.