Ingredientes (para 4 personas):
- 3 tazas de harina.
- 3 cucharaditas de levadura para repostería.
- 100 g de mantequilla.
- 2 cucharadas soperas de aroma vainilla.
- ½ cucharadita de bicarbonato.
- 2 taza de azúcar.
- 5 huevos.
- 200 cl de leche.
- 45 gramos de cacao en polvo.
Preparación:
Con un poco de mantequilla, unta bien la superficie de un molde de repostería para bizcocho, mucho mejor si es desmontable.
En un recipiente hondo pon la mantequilla (toda la que quede después de haberla usado para untar el molde) con el azúcar, dos huevos, la harina, el polvo de levadura para repostería, el aroma de vainilla, el cacao en polvo y media cucharadita de bicarbonato, y remueve de forma enérgica para conseguir una mezcla consistente y uniforme. Agrega la leche en cuanto hayas empezado a moverlo, poco a poco, y sigue batiendo hasta que hayas terminado de incorporarla toda. Mueve continuamente hasta que consigas una masa de textura y color homogéneos, bastante densa y algo pegajosa.
Vierte la masa en el molde engrasado que preparaste al principio y ponlo a hornear en un horno precalentado a 250º C durante 30 a 45 minutos (depende de las características de cada horno). Puedes comprobar tras un tiempo prudencial si el bizcocho está bien cocido clavando un cuchillo; si este sale seco es que el bizcocho ya está hecha; si se le ha quedado pegada la masa, es que necesita un poco más de tiempo de cocción.
Retíralo del horno cuando esté hecho. Te resultará más sencillo sacarlo del molde si antes lo dejas enfriar.