Para quien no lo sepa el rambután es una pieza de fruta originaria de Asia pero que en la actualidad también se planta y comercializa en América. En este artículo te explicaremos como se come una fruta de tan exótico nombre y apariencia.
El rambután o mamón chino presenta un aspecto rojizo en su exterior pero su interior es como el de una uva pelada. El sabor se puede describir entre ácido y dulce. Es muy sabrosa y contiene más jugo que una uva.
A pesar del aspecto exterior que presenta su exterior es muy fácil de pelar y de comer. Solamente debemos quitarle la cáscara que posee el rambután y estará listo para ser degustado. Si nunca has comido ninguno deberás colocar el rambután en la palma de tu mano y observar dónde posee una parte más oscura en la corteza. Una vez localizada empezaremos a pelar la pieza de fruta por esa parte. Cuando la tengamos totalmente pelada podremos ver que tiene la forma de una uva sin piel pero de color un poco más apagado.
Como si se tratara de una uva nos la llevaremos a la boca pero con cuidado pues el rambután a pesar de su aspecto inofensivo posee hueso como las ciruelas por lo que un bocado mal dado o un exceso de confianza nos puede provocar un pequeño susto y evitar que disfrutemos de todo su sabor.
El rambután posee además un alto contenido en vitamina C, como las naranjas, y a parte posee un alto contenido en potasio por lo que es una fruta ideal para los deportistas e hipertensos.
Si estas cansado de comer siempre la misma fruta te invitamos que la pruebes y nos digas que te parece. A nosotros nos gusta su sabor ¿y a ti?