Entre las rosquillas de San Isidro, encontramos las rosquillas listas y las rosquillas tontas que son un dulce típico de la comunidad de Madrid elaboradas durante las fiestas regionales de San Isidro. Hay que destacar que tanto las rosquillas listas como las tontas siguen la misma receta, la diferencia está en que las primeras tienen mayor cantidad de azúcar y, por lo general, están recubiertas de una crema de limón más sabrosa. Estas deliciosas rosquillas son un triunfo en las verbenas realizadas durante la festividad del patrón San Isidro.
¿Quiere aprender a prepararlas en casa? Siga los pasos de nuestra recetas y podrá disfrutar de este exquisito postre durante todo el año.
Ingredientes para 4 persona para la pasta:
- 250 gramos de harina
- 1 sobre de levadura
- 4 huevos
- Aceite de oliva
- 1 copa de anís
Ingredientes para 4 personas para la crema:
- 150 gramos de azúcar
- 1 copa de anís
- El jugo de medio limón
- 2 claras de huevo
Elaboración:
Para comenzar a elaborar la masa de sus rosquillas listas, bata los huevos con el azúcar. Cuando haya obtenido una pasta, incorpore el aceite de oliva frío previamente pasado por una sartén para freírlo un poco. Añada la copa de anís y comience a amasar para conseguir que su masa de rosquillas se ablande.
Cuando la masa esté blanda, córtela en pequeños trozos para preparar las distintas unidades, con las manos engrasadas en aceite o mantequilla para que no se le peque la masa, haga pequeñas albóndigas de masa, posteriormente aplástelas y retire la parte central para darles forma de rosquillas. Déjelas reposar alrededor de una hora y después úntelas con huevo batido para que se doren en el horno. Colóquelas en una bandeja apta para hornos y cocínelas durante diez minutos a unos 180º C.
Mientras se hornean sus rosquillas, prepare la crema que utilizará para pintarlas. En un bol, vierta las claras de huevo, el jugo de limón y el azúcar. Bata hasta obtener un líquido de color blanco, en ese momento debe añadir la copa de anís y un poco de agua. Pinte sus rosquillas con esta crema cuando estén listas y déjelas secar con el horno abierto, evitando que adquieran un color distinto al blanco.