Un rastrillo de almejas es una herramienta utilizada en pesca. Con él podemos remover la arena en los días de marea baja para recoger diferentes tipos de almejas con poco esfuerzo y de una manera muy rápida y precisa.
Consta de una serie de picas con una forma determinada que se utilizan como filtro para pescar únicamente almejas y desechar otro tipo de ser vivo o material que se encuentre en la arena bajo el mar. Gracias a dicha herramienta de arrastre se mantiene el mar intacto, así como su flora y fauna, dado que su tamaño es muy pequeño y no daña al ecosistema al ser en zonas muy cercanas a la costa donde apenas podemos observar vida marina muy abundante en forma de algas o peces pequeños que no deben ser pescados. Es un utensilio creado hace cientos de años y su origen está en los pescadores más laureados de los mares de Europa, los cuales eran enviados a pescar los más suculentos manjares marinos, de ahí que los moluscos sean tan apreciados y caros hoy en día.
El sistema se ha mantenido así durante todo este tiempo, como casi todos los utensilios de pesca de bajura, ya que su funcionamiento es óptimo, muy resistente y no presenta ningún tipo de desventaja, todo lo contrario, es una herramienta de lo más útil en el campo de la mar. En definitiva, gracias al rastrillo de almejas, podemos disfrutar en nuestras casas de alimentos muy saludables y sin poner en peligro a ninguna otra especie.