Un rizador de mantequilla es un utensilio o herramienta utilizado en repostería para crear bonitas hélices, rizos y lazos hechos con una fina capa de mantequilla y que luego se utilizan para la decoración de pasteles y tartas o simplemente para coger capas muy finas de mantequilla y echarlo como ingrediente a algún dulce.
Esta herramienta está formada por un mango de madera o caucho y un extremo de metal alargado que termina en forma de media luna con varios dientes que son los que hacen las veces de cuchillo de mantequilla. Se tiene que utilizar muy cuidadosamente ya que la mantequilla es un elemento muy frágil y dúctil sobretodo si su temperatura no es muy alta y empieza a derretirse.
Hay maquinas enormes que llevan instalados rizadores de mantequilla industriales solamente para la decoración y adición de pequeñas cantidades de mantequilla a masas industriales que se transformarán en bollería o dulces de venta en serie. En las casas no suele haber este tipo de herramienta, pero no es difícil de encontrar en cualquier tienda un poco especializada en la creación de pasteles o ultramarinos.
Cabe destacar que la creación del rizador de mantequilla se produce en materiales muy poco duraderos debido a que son muy finos, como la hoja de un cuchillo, pero a la vez muy rizado, lo cual lo convierte en fácilmente rompible y bastante frágil, curiosamente como el mismo material que está fabricado para trabajar, aunque no es nada peligroso como podría serlo un cuchillo común.