Podemos calcular aproximadamente un cuarto de kilo de langosta por comensal.
Ahora veremos cómo se hace para preparar y cocer una langosta, que servirá de base para cocinar cualquier receta de langosta cocida.
En primer lugar, coloca la langosta sobre una tabla de cocina y átala para que tenga una forma apropiada
Mientras, en una olla habrás puesto a calentar una buena cantidad de agua (unos 4 litros). En el agua añada una zanahoria raspada y cortada en rodajas, una cebolla pelada entera, una hora de laurel, una ramita de tomillo, una ramita de perejil, 150 cl de vino blanco seco, una cucharadita de sal fina y un poco de pimienta. Déjalo cociendo a fuego fuerte durante 20 minutos y luego sumerge la langosta. Tapa la olla, baja a fuego lento y déjalo cocer 10 minutos por kilo de langosta. Una vez cocido, deja enfriar las langostas en el agua durante más o menos 20 minutos, desátalas y escúrrelas.
Separa la cabeza de la cola. Abre longitudinalmente el cuerpo de la langosta con unas tijeras de cocina empezando por la parte inferior del caparazón. Saca la carne de la cola de una pieza y quita la tira negra que verás que tiene a lo largo. De la cabeza, quítale la bolsa del estómago, ya que suele tener algo de tierra.
La langosta se suele servir fría cuando está cocida. Una posible presentación es en una fuente, poniendo el caparazón vacío como base para la carne de la cola cortada en rodajas. La cabeza, vaciada también de la parte que se come, se pone por delante y, todo alrededor, las patas y las partes comestibles dela cabeza. Se puede adornar con lechuga, tomate y huevo duro, y acompañar de una salsa mayonesa.