Materiales usados en las máscaras japonesas

Un actor que cuente con experiencia suficiente dentro de la interpretación teatral, es incluso capaz de lograr distintas expresiones usando la misma máscara solamente con una inclinación justa de la cabeza y el apoyo de las luces.

Las máscaras constituyen un elemento esencial dentro de las danzas teatrales japonesas kabuki y noh. Al igual que en la antigua Grecia, estos accesorios facilitan la comprensión de la obra a través de diferentes estereotipos como el viejo o los personajes sobrenaturales. No obstante, no se descarta una función estética, pues con su interpretación enmascarada, el estilo japonés se distingue de cualquier expresión danzaria del mundo.

Por otro lado, la diferencia entre la sencillez utilitaria de las primeras caretas y los estilizados diseños posteriores, indican un interés por convertirlas también en un elemento artístico.

La madera es el material con que comúnmente se han fabricado, pues además de que es abundante en la naturaleza, hace que las máscaras sean menos pesadas. No hay que olvidar que se usan durante todo el espectáculo, y los actores se agotarían demasiado si se emplearan otros como el metal.

Darle la forma facial y ahuecada puede considerarse como un trabajo de orfebrería refinada. Se emplean varios instrumentos en su confección, aunque la clave está en la mano experimentada del artesano. El punzón marca la línea para recortar, una sierra fina permite obtener la primera vista de la máscara, los cinceles de pequeñas proporciones ayuda a detallar las formas que luego son suavizadas con papel de lija fino y finalmente se retoca el interior –que pega al rostro del actor- con una capa de cera.

La fase de la pintura es muy importante pues le imprime los rasgos más importantes para la apreciación del público. El color más empleado es el blanco en varias capas, y luego otros como el negro para el pelo y el rojo para los labios.

Otros materiales como el latón, se emplean para detalles como los dientes de los animales en busca de mayor espectacularidad; el polvo de oro le proporciona luminosidad y en ocasiones se le agrega pelo real, para hacerlas más verosímiles.

Tanto el kabuki como el teatro noh, son de una belleza singular que se mantiene alejada de los cánones occidentales, en una especie de virginidad cultural que la vuelve aún más interesante para quienes se interesan por la historia oriental.

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Categorias: Danza
Ultima modificación: 05/08/2013