Un disfraz de cartoon lollipop es un clásico disfraz de la noche de brujas o también llamado Halloween en el mundo anglosajón. Este tipo de disfraz es muy famoso entre los niños menores de dieciocho años ya que es muy sencillo de fabricar y muy simpático y agradable a la vista, pues crea una ilusión de inocencia y futilidad en el niño que a todos parece muy adorable y bello.
Los materiales para fabricarlo son absolutamente sencillos y podemos distinguir dos tipos: piruleta y chupa chups. Tanto en el de piruleta como en el de chupa chups la base es la misma ya que ambos comparten la característica de tener palo para sujetarse con la mano. Esta ilusión se puede crear con un simple camisón blanco liso o con cartones, aunque ello dificulta más el movimiento a la hora de caminar o utilizar los brazos. Las diferencias vienen en la cabeza. La piruleta es una gran placa circular de vivos colores como el rojo, verde, amarillo… y casi siempre combinados con el color blanco para formar trazas en espiral hacia el centro de la misma. Esto se puede fabricar recortando dos cartones en forma de círculo o “redondel” y uniéndolos más tarde poniendo en medio la cabeza del chiquillo y haciendo un agujero en el cartón frontal para que la cara asome y no asfixiar así al susodicho. La pintaremos con los colores antes mencionados.
Para la de chupa chups bastará con un casco de motorista ataviado para la ocasión, siempre y cuando no importe a su dueño que se pinte de color rojo o rosa. Si no, un simple bol grande de palomitas también valdrá siempre y cuando vaya pintado.