Hacer un pastel de cumpleaños gótico no tiene que ser una tarea complicada. El pastel de terciopelo rojo tiene un color rojo sangre perfecto para celebraciones de este tipo. Puedes cortar un pastel rectangular básico con forma de ataúd y ponerle glaseado de crema de chocolate negro lo cual lo hará delicioso y simple, y dará como resultado un pastel ideal para una celebración gótica.
Rocía una cacerola con aerosol para hornear y pre-calienta el horno a 180 grados. Haz una crema con media taza de mantequilla y una taza y media de azúcar en un cuenco grande. Agrega una cucharadita de vainilla, huevos y colorante rojo y bate. Mezcla harina, cacao y bicarbonato de sodio en un cuenco aparte. Agrega la mezcla de harina y el suero de leche a la mezcla de mantequilla y azúcar. Bate bien y luego agrega vinagre y mezcla la pasta hasta que tenga un color y una consistencia uniforme. Vierte la pasta en la cacerola preparada y hornea por cuarenta y cinco a cincuenta minutos o hasta que un mondadientes se inserte en el centro del pastel y salga limpio.
Una vez cocinado debemos ir a una tienda de bromas y comprar unas velas muy específicas que explotan. Al prender su mecha, hay unos quince o veinte segundos para salir corriendo y que no nos estalle todo el pastel en la cara, pero eso no lo sabrá la persona a la que le gastemos la broma, de manera que acabará con todo el pastel por la cara, pero con cuidado de que no explote muy fuerte y muera a causa de la explosión o asfixiado por el pastel en su cara.