Los niños más pequeños pueden ser muy lindos pastores para las obras de Navidad y representaciones bíblicas, especialmente si tienen disfraces. Hay dos formas de hacer un disfraz de pastor. La versión rápida funciona bien cuando necesitas un disfraz para salir de un apuro sin coser y con un gasto mínimo.
La versión cosida funciona mejor si planeas reutilizar el disfraz de año en año, o si deseas una apariencia más pulida para el concurso de tu iglesia. En cualquier caso, los colores neutrales lucen mejor. Los disfraces de pastores no tienen porque ser elegantes, o hechos a la perfección, para ser lindos y efectivos. Corta desde arriba y hasta la mitad, una camiseta de adulto vieja. Haz que el niño se coloque la camiseta como si fuera una túnica y sobrepón los dos lados del frente. Ata un pedazo de cuerda o cordel alrededor de la cintura del niño.
Coloca una toalla pequeña o pedazo de tela en la cabeza del niño de forma que el extremo de la toalla cubra ligeramente la frente y el resto cuelgue hacia atrás. Coloca la banda elástica para la cabeza sobre la frente del niño y rodeando la cabeza para mantener la toalla en su lugar. Se pueden añadir otros elementos decorativos o accesorios como el zurrón, una bolsa de lana de oveja que llevaban colgando siempre del hombro a modo de bandolera y donde guardaban su comida y sus enseres para cuando se iban muy lejos varios días a llevar a pastar a sus rebaños.