El tendido de cama cerrada es una maniobra que se efectúa cuando la cama esta vacía antes de que ingrese el paciente. Se realiza para fomentar hábitos higiénicos en del paciente, crear un ambiente limpio, permitir la comodidad física, disminuir la contaminación hospitalaria, y ofrecer seguridad desde el punto de vista bacteriológico.
El equipo a usar consistirá de dos sábanas, un hule o sábana clínica, un cobertor (opcional), una colcha, una o dos fundas, un tónico y un carro con ropa limpia.
El primer paso es colocar sobre la silla la ropa y acomodarla en orden inverso al que se va a usar, previa colocación de la almohada. Después hay que colocar una sábana a partir del punto medio superior del colchón y fijarla en la esquina superior proximal de este, mediante una “cartera”. A continuación se desliza y fija en el extremo inferior del colchón y sobre este, la sabana clínica procurando fijarla por debajo de los bordes superior e inferior del hule. El cuarto paso es introducir los extremos laterales de las piezas colocadas (sábana fija, hule y sabana clínica) por debajo del colchón.
Entonces se pasa al lado contrario de la cama para repetir los pasos anteriores. Se coloca entonces la sabana móvil sobre el colchón a partir del borde medio superior y sobre esta, el cobertor a 15 o 25 cm hacia abajo.
Los pasos siguientes son doblar el extremo correspondiente de la sabana sobre el borde superior del cobertor, colocar la colcha en punto medio superior del colchón, deslizarla hacia abajo y hacer las “carteras” en las esquinas inferiores, vestir la almohada y colocarla en la cabecera, procurando cubrirla con la parte superior de la colcha e introducir los extremos laterales sobrantes de la ropa por debajo del colchón.