Con el nombre común de hortensia se conoce a un género de plantas llamado Hydrangea que está compuesto por unas cien especies provenientes de Asia y América.
Hay hortensias con flores blancas, rosas o rojas. Se puede forzar la coloración de las flores usando fertilizantes ricos en unos elementos o en otros. Para obtener sépalos azules tenemos que añadir al sustrato alumbre de amonio o podemos usar un fertilizante rico en potasio y pobre en nitrógeno y fósforo.
Existen plantas de hortensias de interior y plantas de exterior. Las hortensias de interior necesitan vivir en un lugar luminoso aunque sin estar expuestas nunca a pleno sol cuando están en flor. Hay que regarlas abundantemente todos los días, de forma que el agua llegue hasta el plato inferior. Además, la humedad del aire debe ser lo más alta posible y la temperatura debe encontrarse entre los 14 y los 18 ºC.
La floración de las hortensias de interior comienza en el inicio de la primavera y acaba a finales del otoño. Las flores aparecen agrupadas en ramos, formando inflorescencias, en el extremo de los tallos. Cada flor es por sí misma relativamente pequeña. Después de la floración, corta las inflorescencias y poda los tallos.
Es difícil multiplicar estas plantas de interior por esquejes, es mejor dedicarse a mantener correctamente las plantas que tenemos. Sin embargo, las hortensias de exterior sí pueden fácilmente ser multiplicadas mediante este método.
Las hortensias de exterior prefieren la semisombra y no es recomendable podarlas. Simplemente hay que cortar las hojas y ramas que estén estropeadas por las heladas del invierno.