Cómo arreglar una carrera en una media

Existen momentos en que la perfección de nuestro vestuario no es un detalle que pueda ser librado al azar. Aún así, como si la suerte se enterara de nuestra presión por obedecer a este imperativo de la belleza, inesperados acontecimientos surgen ante nuestros ojos desquiciando nuestro sentidos. Cuando cerrar los ojos y pretender que la falla no existe no es una opción, nada mejor que no dejarse alterar por el surgimiento de tan imprevisto acontecimiento: ya has bajado tu mirada a tus piernas y has notado la carrera de tu media. Empiezas a notar que ese, ahora, tan mínimo defecto, comenzará a extenderse lentamente y con cada uno de tus movimientos, como un lento y silencioso camino a la muerte, hasta cubrir tu pierna entera. Es aquí cuando no debes perder la calma: sabes que se trata de un defecto que llegado para quedarse, imposible de arreglar pero, por suerte, sólo ha sido advertido por tu mirada y así puede conservarse.

Para lograrlo, sólo es preciso ir en busca del famoso esmalte de uñas que habrás utilizado unas horas antes y colocarlo cuidadosamente sobre la corrida de la corrida, siempre debe ser transparente, de ser posible opaco, y debe ser colocado en lado interior de tus medias. Déjalo secar y te habrás garantizado algunas horas de tranquilidad.

Ahora sí, sólo debes hacer uso de tu tranquilidad y dotes actorales para pretender que nada ha sucedido: aquel que parecía un legado del terrible destino, sólo ha existido en tu cabeza y no ha significado en ella más que un recuerdo del principio de su propio ocaso.

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Categorias: Moda
Ultima modificación: 07/20/2012