Una de las prendas que más opciones puede presentar a la hora de lucir es sin duda el pañuelo. Este no sólo se reduce a un simple accesorio sino que puede ayudarnos a cambiar completamente nuestro look fundiéndose en un prenda de vestir.
Existen multitud de formas para atar un pañuelo, tantas o más como diseños existen. La forma tradicional de usar un pañuelo es utilizarlo en la cabeza sirviendo para adornar el pelo. Podemos usarlo para recoger nuestro pelo, utilizarlo para anudar unas coletas o utilizarlo a modo de cinta.
Otra forma de utilizar este accesorio es luciéndolo en el cuello. En esta parte de nuestro cuerpo las opciones son infinitas y a parte de abrigarnos podremos sacar todo su potencial dependiendo del pliegue y la forma de anudarlo que empleemos. Por ejemplo si buscas un look desenfadado puedes hacer un pequeño nudo y dejar las puntas al vuelo. Una vez tengamos el pañuelo colocado y anudado moveremos el nudo hacia el lado derecho o izquierdo según te guste más como quede.
Otra forma más atrevida de lucir este accesorio es usarlo como un top. ¿Quién dijo que tiene que lucirse obligatoriamente al cuello? Esta es una buena opción para vestir durante el verano y además son muy cómodos de usar. El uso del pañuelo no se reduce sólo a estos usos. Si tenemos un pañuelo también podremos transformarlo con un par de pliegues en un colorido cinturón o una bonita bolsa.
Si tienes un pañuelo por casa y no le encontrabas usos esperamos que estas pequeñas indicaciones te hayan servido para coger algunas ideas. El pañuelo puede ser algo más que un simple trozo de tela.