Comprar un pony: pros y contras

Aunque tener un pony sea la ilusión de casi cualquier niño, comprar un pony es una decisión que no debe tomarse a la ligera. En ocasiones, es mejor apuntar al niño a una escuela hípica donde pueda montar un pony que comprarle uno aunque tengas sitio donde tenerlo.

Los pros de comprar un pony es que puedes montarlo siempre que quieras. Son animales que tienen un buen comportamiento con los niños a pesar de ser tercos, y que son útiles para hacer terapia con personas discapacitadas o con problemas psiquicos o físicos.

Comprando un pony podrás participar en concursos de belleza y sus éxitos te darán prestigio social.

Los ponys sólo son adecuados para niños o personas de pequeña talla y peso. Dependiendo de las características del jinete, puede ser preferible comprar un caballo no muy alto.

Además de ser un animal caro, el mantenimiento es costoso. Es necesario ser realista con tus posibilidades económicas. Si no tienes un sitio para tenerlo, tendrás que pagar por tener a tu pony en un picadero o escuela hípica. El pago del mismo suele incluir gastos de herraje y alimentación pero no otros gastos como el veterinario y la montura. Si tienes un sitio donde tener a tu pony como una finca o un prado, te ahorrarás parte de este mantenimiento. De todos modos, los gastos seguirán siendo muchos: herraje, veterinario, dentista, domador, alimentación, utensilios para su monta, etcétera. Además, tanto la montura y otros utensilios para la monta del pony como el equipamiento para el jinete deben ser renovados cuando sea necesario, según el uso de los mismos, gastos extra que tendrás que tener también en cuenta.

 

 

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Categorias: Naturaleza
Ultima modificación: 07/20/2012