Algunas clasificaciones de los cactus son las siguientes:
Cactus primitivos: son cactus raros con hojas similares al resto de las plantas. Generalmente se los encuentran en forma de arbustos trepadores con fuertes espinas en tallos y hojas. Con flores muy llamativas parecidas a las rosas silvestres, como la pereskia.
Cactus chumberas: Los cactus chumberas constan de tallos de formas cilíndricas o aplanadas con espinas finas y pilosas. Producen hojas, flores o frutos de vivos colores, a veces son comestibles, higos chumbos. Las chumberas son plantas bastante resistentes al calor y a la sequía que además pueden soportar heladas de hasta menos diez grados Celsius si el sustrato está seco
Cactus tropicales: Se les denomina también cactus-orquídea ya que se desarrollan normalmente como plantas epifitas, plantas que crecen sobre otras plantas. Los cactus tropicales poseen tallos largos, segmentados y delgados, tienen flores de gran tamaño y llamativas, y suelen generar raíces aéreas para fijarse a otras plantas. Esta especie es sensible al frío, necesitan de humedad y suelos ricos y estar protegidos del sol.
Cactus columnares: Se trata de cactus en los cuales los tallos tienen forma de columna. Producen flores muy coloridas. En el caso de la especie equinopsis, las flores aparecen durante la noche y mueren por la mañana. Los cactus columnares crecen lentamente y son resistentes a la sequía y al calor. Necesitan riego y abono en en las estaciones primavera y verano.
Cactus globulares: Son cactus con tallos de forma redonda, originarios de América aunque existen diferencias con los cactus de Sudamérica y centro América. En el centro y norte de América los tallos son apostillados y con muchas espinas formando un gran diámetro. Durante el día florecen y su flor se ubican en la parte más alta de la planta.