Ayuno, una práctica muy saludable

El ayuno se ha practicado en casi todas las religiones del mundo y a lo largo de muchos siglos. Su función ha sido siempre muy sencilla, por una parte purificar la mente y por otra parte purificar el cuerpo.

El ayuno es la abstención voluntaria de no ingerir algunos alimentos o bien de no ingerir ninguna clase de alimentos. Se realiza por períodos cortos de tiempo y también se puede optar por no ingerir líquidos durante el ayuno. Normalmente se suele realizar el ayuno por motivos religiosos.

Los beneficios que se obtienen con el ayuno son diversos y muy notables. En primer lugar, se favorece el trabajo de la flora intestinal. Además, se purifica la sangre y se eliminan las toxinas que puedan ir en ella. Con el ayuno se logra limpiar los riñones y desintoxicar el hígado. Junto a estas características se logra eliminar los líquidos retenidos en el cuerpo, que se renueve la epidermis y el cabello. Dado que el cuerpo no ingiere alimentos se gastan las reservas energéticas por lo que se producirá una reducción del peso. Por otra parte, si tenemos desajustes en la presión arterial esta se normalizará. Una vez terminado el ayuno tendremos la sensación de tener más energías y de ser más vigorosos.

Todas estas ventajas se deben a que como no se introducen toxinas en el organismo este tiene el tiempo suficiente para eliminar todas aquellas acumuladas en el organismo. Debemos tener siempre en cuenta que el ayuno debe realizarse siempre bajo supervisión médica para no incurrir en ningún problema de salud.

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Categorias: Salud
Ultima modificación: 10/02/2013