Cómo hacer una dieta purificante

Consideremos que nuestro organismo es como una máquina biológica, que alcanza su óptimo funcionamiento cuando todos y cada uno de sus componentes trabaja eficientemente, siendo el alimento el combustible que da energía y mueve esta máquina hecha por Natura, y que como cualquier otro mecanismo, necesita de un mantenimiento frecuente para que realice su labor usual de manera efectiva.

Las dietas purificantes o depurativas cumplen esa función, la de facilitar al organismo la expulsión de residuos de toxinas que hayan quedado acumuladas en el mismo, que son generalmente introducidas al cuerpo a través de ciertos alimentos, en especial aquellos muy refinados, con muchas grasas, cuyos ingredientes sean artificiales o incluso, aquellas toxinas que aspiramos al estar en lugares con mucha polución o contaminación ambiental.

Otro beneficio implícito de estas dietas desintoxicantes, es que al mantener al organismo sano, el sistema inmunológico es a su vez fortalecido, pudiendo asimismo, ser mejor aprovechados los nutrientes de los alimentos.

Desintoxicando el cuerpo

Durante el tiempo en que realice la dieta depurativa deberá dejar de consumir la mayoría de los alimentos de su dieta habitual, reemplazándolos con frutas, verduras, cereales que aporten fibra, jugos, infusiones y abundante agua, debiendo eliminar los alimentos refinados, farináceos, alcohol, grasos, de origen animal, gaseosos y azucarados. También deberá reducir la cantidad de ingesta de sal, la cual en exceso genera retención de líquidos e hipertensión arterial.

Existen varios tipos de dietas depurativas, algunas utilizan sólo una fruta como el limón o la manzana, o combinaciones de varias, también algunas son hechas exclusivamente con hortalizas o verduras, u otras son a base de jugos. Lo ideal es que la dieta depurativa incluya si es posible a todas a estas, de manera a que todos los nutrientes de origen natural, estén presentes.

Es recomendable que evite comer abundante el día anterior al inicio de la dieta, pues es mejor ir habituando al cuerpo gradualmente, evitando así cambios bruscos. Comience la transición incluyendo ensaladas y frutas a su dieta habitual, hasta reemplazarla completamente. Realice la dieta depurativa durante tres días, la cual puede repetir cada mes, o cuando sienta que su organismo lo necesita.

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Categorias: Salud
Ultima modificación: 11/11/2013