El sistema inmunológico no sólo identifica y destruye los agresores que intentan invadir el cuerpo humano, sino que también los puede reconocer si intentan introducirse de nuevo en el organismo. Por esta y otras razones es importante disponer de unas buenas defensas contra los ataques externos. Podemos contribuir a ello siguiendo algunos fáciles consejos caseros.
Una de las formas de conseguir esto es consumir diariamente coliflor, nabo y rábano para reforzar el sistema inmunológico, o tomar diariamente una cucharada de miel. El té de ginseng, el té verde o la yerba mate estimulan la producción de células inmunitarias.
Los zumos o jugos también nos ayudan a disponer de mejores defensas. Podemos por ejemplo extraer el jugo de una zanahoria de tamaño regular y dos naranjas y mezclarlo. Hay que tomar este preparado diariamente en el desayuno. Otra receta es elaborar un jugo con cinco guayabas, dos naranjas, tres limones, una cebolla pequeña y media taza de agua. Se debe hervir la cebolla en el agua por 10 minutos. Se corta en cuarto la guayaba y luego se cortan y exprimen de los limones, naranjas y toronjas. Se retira la cebolla del agua y se mezcla con el jugo. Se recomienda beberlo al momento.
Otros jugos que se pueden preparar son mezclando rábanos, un limón, dos naranjas y agua; o bien una naranja, dos dientes de ajo, una cebolla y brócoli; o por último licuar dos mandarinas, una cucharada de jengibre fresco rallado, zumo de limón y una cucharadita de miel de abeja.
Como últimos consejos evite comidas con grasas y azúcares refinados, consuma mucho agua al día, ya que estimula el sistema inmunitario y expulsa las toxinas; practique ejercicio diariamente durante 30 minutos y realice ejercicios de respiración y de relajación.