Importancia de las plantas medicinales

Las plantas constituyen, desde tiempos prehistóricos, la más socorrida fuente para el alivio y la cura de muchas enfermedades físicas y mentales del hombre. El origen de la industria farmacéutica está en la extracción industrial de los principios bioactivos de las plantas medicinales.

Incluso en la elaboración de muchas de las medicinas sintéticas empleadas en la actualidad, se reproduce la estructura de componentes bioactivos del reino vegetal. Tales son los casos de la quinina, el opio y la aspirina, cuyo nombre químico (ácido salicílico) nos recuerda que procede de la corteza del sauce o Salix spp.

Además de servir de fuente bioactiva o modélica a la hoy pujante industria farmacéutica, las plantas medicinales en su forma natural sirven de alivio directo a millones de personas en todo el mundo.

Los abusos y peligros de los medicamentos comerciales, muchos de los cuales se prescriben a sabiendas de su pésima relación riesgo-beneficio, han empujado a muchos, incluso en los países ricos, a asumir alternativas más naturistas.

Las prolongadas crisis económicas y políticas que sacuden al mundo, también han conducido a un aumento en el uso de las plantas medicinales locales como única manera de proporcionar alivio y cura.

En casi todas las variantes de la llamada medicina alternativa, las plantas juegan un rol de primer orden. Desde las Flores de Bach hasta la homeopatía, sin olvidar la medicina ayurvédica, la aromaterapia, el chamanismo y hasta la acupuntura clásica con sus tabacos de moxibustión enrollados con hojas botánicas secas, las plantas medicinales son fuente infinita de modernidad y tradición.

De ahí la importancia del cuidado y mantenimiento de la biodiversidad, pues son más las especies cuyas propiedades están por descubrirse que las conocidas hasta ahora.

Veamos algunas de las más renombradas y sus usos. Ajo: hipotensor, vasodilatador periférico, hipocolesteromiante, antiparasitario; amapola: antihipertensivo, analgésico (codeína y morfina); ginkgo: antioxidante, antiagregante, vasodilatador cerebral; efedra: broncodilatador, cardiotónico, termogénico.

 

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Categorias: Salud
Ultima modificación: 06/11/2012