Signos de la adicción al zolpidem

Zolpidem crea adicción a los hipnóticos sin poder controlarlo. En tratamientos de larga duración o de por vida, con los trastornos psicológicos añadidos que eso crea, puede aparecer la merma de la capacidad de trabajo, olvidos, degradación del hígado, incluso problemas mentales graves que no han aparecido antes de la ingesta en la vida del paciente.

Tenemos que proteger a las personas de nuestro entorno. Si no hay opción para el problema, debemos solicitar al médico el tratamiento según lo que el fármaco fue creado, si es insomnio solo de 7 a 15 días. Los daños durante este tiempo pueden permanecer de por vida si no se interrumpe el tratamiento. El uso de agentes sedantes o hipnóticos puede llevar al desarrollo de dependencia física y psicológica. El riesgo de dependencia aumenta con la dosis, la duración del tratamiento y la asociación con benzodiacepinas. También es mayor en pacientes con antecedentes de abuso de alcohol o drogas.

Estos pacientes deben ser cuidadosamente vigilados cuando reciben hipnóticos. Si hay dependencia física y suspendemos el tratamiento de manera abrupta puede tener síntomas de privación como insomnio, cefalea, dolor muscular, ansiedad, tensión, agitación, confusión e irritabilidad. En casos graves los síntomas pueden ser desconexión de la realidad, despersonalización, hiperacusia, entumecimiento y hormigueo en las extremidades, hipersensibilidad a la luz y a todo contacto físico, alucinaciones y crisis convulsivas. Una persona que abusa de sedantes como estos se verá como sedado o con somnolencia.

Puede hablar lentamente y tener dificultad para hacerlo. No será capaz de concentrarse y puede tener falta de concentración y mala memoria. Puede tener la respiración lenta y lo mismo ocurrirá con el ritmo cardíaco. Su presión arterial estará baja. También reducen las inhibiciones, por eso, pueden exhibir un mal control de sus acciones y pueden meterse en situaciones arriesgadas en las que normalmente no se meterían.

Si toman demasiada dosis pueden llegar a la inconsciencia. Si esto pasa se deben llevar a urgencias inmediatamente, donde se le pueden administrar fármacos antídotos. También puede haber aumento del temblor de manos, náuseas o vómitos, alucinaciones visuales, táctiles o auditivas transitorias, o ilusiones, agitación psicomotora, ansiedad y crisis epilépticas.

 

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Categorias: Salud
Ultima modificación: 03/20/2013